Corea, ese país distante pero cercano
La Habana/Cuando los niños cubanos juegan a mencionar países lejanos, hablan de Singapur, Burundi o Corea. Pero en este último caso, no piensan en el país controlado por Kim Jong-un, sino en la otra parte de la península, donde nació Samsung. Con la producción cinematográfica ocurre otro tanto: las salas se llenan con las producciones que llegan de la tierra de Hyundai y quedan vacías si la película provienen del país del “Presidente eterno”.
Con todas las butacas ocupadas y decenas de personas a las afueras de la sala, comenzó este jueves la proyección de la primera película de la semana de cine surcoreano en el Multicine Infanta de La Habana. El evento, llega este año a su tercera edición y ha sido organizado por la Cinemateca de Cuba junto a la Asociación de Intercambio Cuba-Corea.
El público que se reunió en la céntrica locación resultó ser muy diverso, sobre todo si se tiene en cuenta que Cuba no mantiene relaciones diplomáticas con Corea del Sur y ese país asiático carece de una representación oficial en la Isla. No obstante allí estaban funcionarios del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) y el muy oficial Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP).
El público que se reunió en la céntrica locación resultó ser muy diverso, sobre todo si se tiene en cuenta que Cuba no mantiene relaciones diplomáticas con Corea del Sur y ese país asiático carece de una representación oficial en la Isla
También asistieron estudiantes surcoreanos residentes en la Isla y varios representantes diplomáticos de otras naciones, como el embajador de la República Popular de China.
El fundador de Busan International Film Festival, Kim Dong-Ho dio la bienvenida en español y aseguró que una semana de la filmografía de su país ayudaría a “entender cómo es Corea” y “mejorar nuestra relación”. Después elogió el nivel cultural de los cubanos y se despidió con un emotivo “gracias” que apresuró el aplauso de los espectadores. Llegó la oscuridad y con ella un punto de luz que se fue ensanchando en la pantalla.
La noche dio paso a Un día difícil, del director surcoreano Kim Seong-Hoon. El thriller mantuvo la tensión hasta el final con los avatares del detective Gun-Su, que intenta ocultar el cuerpo de una persona a la que atropelló. Una cerrada ovación justo cuando comenzaron a proyectarse los créditos, confirmó a los organizadores que habían acertado en elegir la cinta para “romper el hielo” de esta semana.
Entre los responsables de la cuidada selección fílmica se halla Susana Molina, vicepresidenta del ICAIC y quien comentó a 14ymedio que “todas las películas en años anteriores ha tenido buena calidad, pero la curaduría de estas la realizó Tony Masón y además esta edición muestra un programa más amplio”.
La programación de la semana de cine coreano se extenderá hasta el próximo jueves y se destacan entre los títulos filmes como Soy un Cyborg, Moebius, 200 libras de Belleza, La Chica de la Consigna, La chica satélite y La vaca lechera. Producciones que abordan el romance y la sobrevivencia en un mundo de violencia, además de las tramas policíacas y los conflictos de una chica obesa para triunfar en el mundo del pop.
Sin embargo, pocos momentos podrán superar a la noche inaugural, en que se mezcló el cine con la diplomacia y cierta pizca de farándula. Tras la proyección de la cinta inicial, las celebraciones se trasladaron hacia el Restaurante Bar Su, en Miramar, donde la sorpresa de la noche fue la presentación de jóvenes cubanos que cantaron en coreano y bailaron danzas típicas de la región.
En las mesas más cercanas al escenario aplaudían y reían reconocidos actores como Enrique Molina, Isabel Santos y Luisa María Jiménez, todos hechizados por ese país distante pero cercano.
