Raúl Castro se viste “de morado”
La Habana/Un chiste popular indaga sobre el color del tren que llega con retraso a la estación. La respuesta es un juego de palabras: “de morado”. Raúl Castro se ha vestido justo de ese tono en relación a sus obligaciones para fin de año. El retraso en cumplir ciertos compromisos amenaza la imagen de puntual y pragmático que ha querido labrarse el General Presidente.
El pleno del Comité Central del Partido programado para este diciembre aún no tiene fecha. La cita partidista debe aprobar la esperada Conceptualización del modelo económico y social, además del Plan de desarrollo económico hasta 2030, pero apenas le quedan cinco días para cumplir con lo prometido.
Una llamada telefónica al Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) aclara pocas dudas. La secretaria de Olga Lidia Tapia Iglesias, miembro del Secretariado al frente del Departamento de Educación, Ciencia y Deporte, confirma a 14ymedio que “no han puesto fecha” para la cita pendiente.
La secretaria de Olga Lidia Tapia Iglesias, miembro del Secretariado al frente del Departamento de Educación, Ciencia y Deporte, confirma a 14ymedio que “no han puesto fecha” para de la cita pendientes
Ambos documentos fueron debatidos por la militancia del PCC y la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), además de la dirección de organizaciones de masa y gremiales. La prensa oficial enfatizó en ese momento la masiva conformidad con los textos presentados, aunque reportó varias propuestas de modificaciones y adiciones.
Especial revuelo ocasionó el punto 104 de la Conceptualización en el que se reafirma una idea planteada en los Lineamientos del PCC. El cubo de agua fría para los empresarios locales se concentra en que “no se permite la concentración de la propiedad y la riqueza en personas naturales o jurídicas no estatales”. Una propuesta que debería ser aceptada o rebatida este diciembre.
De incumplirse la realización del pleno, la seriedad que Raúl Castro ha querido imprimirle a sus actos oficiales sufriría un duro golpe. Obligaría también a justificar públicamente la informalidad. El ciclón Matthew, la sorpresiva elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos y el fallecimiento de Fidel Castro, podrían estar entre las excusas oficiales.
A diciembre le quedan tantos días como dedos a una mano. Al menos dos de ellos serán usados en la próxima sesión convocada para la Asamblea Nacional del Poder Popular. Dada la tradicional confusión de roles entre el Gobierno, el Parlamento y el Partido, quizás en las sesiones con los diputados se informe sobre la fecha del cónclave partidista.
Pero si no ocurre antes de que finalice el año, Raúl Castro necesitará mostrar una explicación muy convincente.