Con la resaca del ciclón y sobre el “caso Gorki”
Ya estoy acostumbrada a que desde mi piso catorce cualquier vientecito parezca un huracán categoría cinco. Hoy me levanté y comprobé que el barrio sigue en el mismo lugar, la Plaza de la Revolución tan vertical como ayer y sólo faltan algunos árboles en las inmediaciones. No tengo electricidad todavía, pero al menos así tengo una buena justificación para no quemarme mucho la vista frente a la pantalla.
Pongo a continuación un texto de Claudia, la otra persona que sostuvo el cartel con el nombre de Gorki en el concierto de la Tribuna Antiimperialista y una breve cronología hecha por mí –de cinco páginas- sobre lo ocurrido entre el jueves 28 y el viernes 29 de agosto. Lamento no haber podido ser tan breve como acostumbro, la situación merece recordar los detalles.