‘También fui otra: MásCaras’
Lugar: Espacio híbrido, sede de la Ondi, calle Bellavista, entre Tulipán y Lombillo, Nuevo Vedado, Plaza de la Revolución.
Fecha de inicio: 25-11-2025, 3:00 p.m.
Fecha de fin: 25-12-2025
La Habana/La exposición colectiva También fui otra: MásCaras llega coincidiendo con el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La muestra reúne a más de medio centenar de artistas cubanas y extranjeras que, desde la pintura, la fotografía, el performance, el videoarte y la instalación, abordan las múltiples formas de violencia —física, simbólica y estructural— que atraviesan la vida de las mujeres en Cuba y el mundo.
La exposición forma parte de la Jornada por la No Violencia que busca visibilizar las desigualdades y discriminaciones que permanecen arraigadas en la sociedad cubana. Las obras seleccionadas interrogan temas como el control del cuerpo femenino, la permanencia de los estereotipos de género, la presión social sobre las identidades disidentes, los silencios impuestos y la violencia doméstica. El conjunto propone un recorrido emocional y crítico por narrativas de resistencia y memoria.
Entre las participantes destacan creadoras consagradas y nuevas voces del panorama contemporáneo, reunidas en un mismo espacio para cuestionar la persistencia del machismo y las estructuras que normalizan la vulnerabilidad femenina. Fotógrafas, pintoras, escultoras y artistas del performance ofrecen una cartografía diversa de la experiencia de ser mujer en la Cuba actual: desde piezas que denuncian el feminicidio —un fenómeno subregistrado y aún sin protocolos oficiales de atención en la Isla— hasta obras que reflexionan sobre la violencia simbólica que se reproduce en la vida cotidiana, el hogar, la educación o los medios de comunicación.
La exposición también incorpora proyectos colaborativos y obras realizadas específicamente para esta edición, algunas de ellas concebidas a partir de testimonios reales y procesos comunitarios. Según la nota institucional, También fui otra: MásCaras invita a pensar en las identidades femeninas más allá de las imposiciones sociales, recuperando memorias personales que suelen quedar ocultas tras el mandato de la fortaleza o el sacrificio.
La curaduría subraya la importancia del museo como espacio público para el debate en torno a la violencia de género, en un contexto en el que diversos colectivos y plataformas feministas —muchas de ellas independientes— han reclamado durante años una ley integral contra la violencia machista, estadísticas oficiales sistemáticas y mecanismos efectivos de protección.
Hasta el 25 de diciembre, la exposición permanecerá abierta y es una oportunidad para acercarse a un conjunto de obras que no solo reflexionan sobre el trauma, sino que también celebran la fuerza, la diversidad y la persistencia de las mujeres en la creación artística contemporánea.