Dos centenares de cubanos pierden su línea fija de teléfono en Sancti Spíritus por impago

La mayoría de los casos corresponden a "viviendas cerradas", informó 'Escambray'

Etecsa reporta un aumento de clientes en Sancti Spíritus que han caído en impago de sus facturas y, por lo tanto, se tienen que desconectar del servicio. (Escambray)
Etecsa reporta un aumento de clientes en Sancti Spíritus que han caído en impago de sus facturas y, por lo tanto, se tienen que desconectar del servicio. (Escambray)
14ymedio

02 de agosto 2023 - 19:05

La Habana/Las cifras de usuarios de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) desconectados en la provincia de Sancti Spíritus son reveladoras tanto de la crisis económica que atraviesa la Isla como de la emigración que no cesa. Hasta 200 clientes han perdido su línea fija, informa este miércoles Escambray, por retrasos en los pagos de las facturas.

Un 60%, precisó Miladys González, jefa de marketing del monopolio estatal en la provincia, se concentra en los municipios de Sancti Spíritus y Cabaiguán. La mayoría de los casos corresponde a "viviendas cerradas", prosigue la funcionaria, que no alude al éxodo imparable desde hace casi dos años.

Además, refiere el diario provincial, hay 150 clientes en riesgo de perder el servicio porque acumulan más de tres meses sin abonar la cuenta, la mayoría reportados en Sancti Spíritus, Trinidad y Jatibonico.

Si transcurren esos seis meses sin efectuarse el pago, continuó González, Etecsa procede a dar de baja el servicio

Los datos se dan a conocer dos meses después de haber entrado en vigor una resolución que obliga a Etecsa a desconectar las líneas telefónicas, con previo aviso al propietario, después de 30 días de la fecha del vencimiento de la factura no pagada.

La norma prevé que puede restablecerse la conexión 24 horas después de que el usuario pague el total de la deuda antes de que pasen 180 días desde el vencimiento.

Si transcurren esos seis meses sin efectuarse el pago, continuó González, Etecsa procede a dar de baja el servicio. En este caso, la norma dicta que se avise al cliente con un mínimo de 72 horas hábiles en el domicilio registrado a través de un aviso que se entrega "a la persona que se encuentre en el lugar en ese momento", indistintamente si es propietario o un representante.

Si el cliente quiere mantener el servicio, Etecsa advierte que la reconexión conlleva un "costo" adicional que se cargará en la próxima factura.

González reconoció que la empresa se enfrenta también a un déficit de papel y otros insumos que le dificulta la distribución de facturas impresas, por lo que llama a los clientes a suscribirse para recibir el documento en el correo electrónico o deben comunicarse con Etecsa a través de su centro de llamadas 112 o en la aplicación Transfermóvil.

Aunque el número de líneas móviles en Cuba va camino de los ocho millones y supera con mucho al poco más de un millón de líneas fijas, los celulares aún no han desplazado del todo al teléfono fijo, que sigue siendo uno de los principales canales de comunicación para muchas familias, principalmente en las zonas rurales.

Sin línea fija, el cliente tiene que conformarse con navegar por la web a través del servicio de datos móviles, con su congestión, oscilaciones de velocidad y frecuentes cuelgues

A eso se le añade que solo es posible contratar el servicio de conexión a internet Nauta Hogar, que se brinda a través de la fibra óptica, cuando se tiene una línea de telefonía fija. Sin ella, el cliente tiene que conformarse con navegar por la web a través del servicio de datos móviles, con su congestión, oscilaciones de velocidad y frecuentes cuelgues.

También en las ciudades y pueblos hay pequeños negocios que no pueden permitirse el costo de una línea móvil. Es el caso de Antonio, un tapicero en Nuevo Vedado, el núcleo comercial de La Habana, quien realiza todos los acuerdos con clientes a través de la línea por cable.

Todo cubano que ha vivido en los últimos años tiene alguna anécdota de cómo las líneas "hereditarias" se han podido vender al mejor postor. Así Lucía, vecina de Luyanó, en el municipio habanero de Diez de Octubre, recuerda el alivio que sintió al deshacerse de su teléfono fijo. Ella era una de las dos residentes en la zona que tenía el aparato y, por lo tanto, "los vecinos creían que era una obligación servirles". Con la despenalización del dólar, vendió la conexión a 600 dólares y con ese dinero mandó a reparar un refrigerador que se había dañado por los constantes apagones.

"Volvimos a tomar agua fría y tuvimos para guardar los alimentos, y también compré algo de ropa para mis hijos", rememora para 14ymedio. Otro vecino de Santiago de Cuba cuenta a este diario que en 2014 vendió su línea fija en 400 dólares y con ese dinero pagó parte del viaje para salir de Cuba de la Isla.

Dado el complejo proceso para conseguir la autorización de una conexión fija, una vivienda con este servicio tiene un valor añadido y un propietario puede pedir más dinero por el inmueble si quiere venderlo o alquilarlo. En las plataformas de comercio electrónico también es común que los cubanos ofrezcan líneas de telefonía, a precios que van desde 300 a 500 dólares, según puede constatarse en el sitio de compraventa digital Revolico.

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