Una mujer interpela al mandatario cubano en su gira en helicóptero por las provincias inundadas
Miguel Díaz-Canel estuvo rodeado todo el tiempo de un gran operativo de seguridad
La Habana/En un recorrido por las provincias de Camagüey y Granma, las más afectadas por las intensas lluvias de la semana pasada, Miguel Díaz-Canel fue interpelado por una mujer sobre la situación deplorable en la que viven varias familias y citó el caso de un ex combatiente. "Ni es el único, ni el único vulnerable", le contestó el mandatario en medio de la multitud en el pequeño pueblo de Jiguaní.
Díaz-Canel, que llegó al poblado en un helicóptero, estuvo rodeado todo el tiempo de un gran operativo de seguridad. Decenas de pobladores de Jiguaní (Granma), una de las comunidades más golpeadas por las inundaciones de la pasada semana, se acercaron al lugar donde tocó tierra la aeronave.
En una transmisión de un residente se ve a una mujer hablando enérgicamente con el mandatario mientras le explica el "caso social" de Dionisio Rodríguez, que "duerme en una hamaca y en una casa que se está cayendo". "La familia del combatiente dice que no tiene recursos", explica, alterada.
Díaz-Canel, rodeado de su comitiva y una mujer que toma apuntes, responde: "tenemos cientos de combatientes y no tenemos todos los recursos para resolver los problemas de todo el mundo". No satisfecha con la respuesta, la mujer menciona otros casos de familias en condiciones de vulnerabilidad. Finaliza su reclamo con la frase: "Eso es todo lo que le quería decir", mientras se hace a un lado.
"Tenemos cientos de combatientes y no tenemos todos los recursos para resolver los problemas de todo el mundo"
El gobernante continúa la conversación y responde que la situación se agravó por las inundaciones, pero que el Gobierno ha estado ayudando y buscando recursos. Nuevamente, la mujer, molesta, le cuenta el caso de una niña que duerme en una colchoneta mojada. "Vino una trabajadora social y dijo que ella no dormía ahí y que no se podía cambiar. Es una falta de respeto", sostuvo.
Entretanto, la prensa oficialista llenó sus primeras planas con la visita del mandatario por las zonas afectadas donde se hizo "hincapié en agilizar las faenas recuperativas", señaló Cubadebate. Los vecinos también expresaron "la confianza y el agradecimiento por la preocupación de la máxima dirección del país", cita el medio.
Los medios nacionales señalan que en Jiguaní los acumulados de agua alcanzaron niveles "nunca antes vistos" y que algunas familias aún sacan sus pertenencias para secarlas durante el día. Solo en la provincia de Granma, las lluvias afectaron a 57.504 personas en 105 comunidades. En el registro se incluye a 237 viviendas con daños, de las cuales 49 sufrieron derrumbes totales.
El Gobierno fue duramente criticado porque se tardó varios días en declarar el estado de emergencia por las lluvias, que dejaron seis fallecidos en el oriente de la Isla, y donde los ríos se desbordaron y arrasaron varios puentes y carreteras.
El Ministerio de Agricultura reporta la pérdida de 159 cabezas de ganado mayor y 126 ovinos, además de daños en 20.012 hectáreas de varios cultivos. Los más afectados son las plantaciones de yuca, con 4.742 hectáreas destruidas, así como 3.763 de calabaza, 1.308 de arroz, 1.314 de boniato, 965 de plátano y 589 de frijol caupí.
De acuerdo con el Instituto de Recursos Hidráulicos, en los primeros 10 días de junio en la región oriental las precipitaciones acumularon 211,3 milímetros, equivalente a 141% superior a la media histórica.
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