'El Duque' regresa a Cuba para un evento caritativo

El cuatro veces campeón de la Serie Mundial Orlando El Duque Hernández volverá a Cuba para participar en el torneo Con el golf en la sangre, según informa este martes El Nuevo Herald. El objetivo del evento, que abrirá sus puertas el próximo 6 de mayo en Varadero, es recaudar fondos para el centro La Edad de Oro, un hogar para impedidos físicos y mentales que acoge a 200 niños y jóvenes en La Habana.

"Cuba siempre ha estado y estará en mi corazón'', declaró El Duque a El Nuevo Herald. El deportista, que regresa después de 19 años de ausencia, ha añadido que arde en deseos de reencontrarse con los suyos "ya sea en la calle, la playa, el parque o caminando por el malecón".

Omar Claro, el creador de Con el golf en la sangre, se mostró contento por el regreso de El Duque. "Ningún pelotero cubano vivo desata tantas pasiones y la gente de su tierra, de toda la Isla, quiere verlo y abrazarlo. Han pasado muchas cosas, pero ha llegado el momento", reporta El Nuevo Herald. El responsable del evento recordó que el viaje "no tiene nada que ver con Grandes Ligas ni ninguna otra organización" y que los participantes del torneo podrán "moverse libremente" por el país e "interactuar con sus familiares y amigos".

Al evento, que durará tres días y se celebrará en el Varadero Golf Club, asistirán otros destacados deportistas como Liván Hernández, Rey Ordóñez y Luis Castillo.

Al evento, que durará tres días y se celebrará en el Varadero Golf Club, asistirán otros destacados deportistas como Liván Hernández, Rey Ordóñez y Luis Castillo

Es la primera vez que Con el golf en la sangre sale de sus fronteras para un evento benéfico, en este caso para ayudar a La Edad de Oro.

Tanto Orlando como Liván ya participaron en eventos de beneficencia para ayudar a los más necesitados del país, como cuando en 2008, tras el paso de los huracanes Gustav y Ike, organizaron un juego con el nombre Un jonrón para Cuba.

El Duque salió de Cuba en 1997 en una rústica balsa que fue interceptada por los guardacostas estadounidenses. Las mediaciones del representante de deportistas Mark Cubas, evitaron que fuera repatriado a la Isla. Después de una temporada en Costa Rica negoció su pase a las Grandes Ligas como agente libre y un contrato en los New York Yankees de cuatro años por 6,6 millones de dólares.

Con una legión de fanáticos dentro de Cuba, la escapada del estelar derecho capitalino ha sido descrita por muchos seguidores del béisbol como el inicio del declive que vive en la actualidad el pasatiempo nacional. La salida del estelar pitcher también contribuyó a que los fanáticos de la Isla se acercaran más a los derroteros de las Grandes Ligas, cuyos partidos la televisión nacional solo comenzó a transmitir en 2013.