España hereda lo mejor del balonmano cubano con el hijo de Julio Fis
Balonmano
El padre llevó a la selección nacional a su mejor resultado histórico, mientras Marcos es una joven promesa en Europa
Matanzas/Egipto es un lugar simbólico para el balonmano cubano. Allí, en 1999, la selección nacional logró su mejor resultado histórico en un Mundial al terminar entre las ocho mejores. En ese equipo jugaba Julio Fis, una de las grandes figuras de la Isla.
Veintiséis años después, el país africano volvió a ser escenario de una gesta, esta vez protagonizada por su hijo, Marcos Fis. Con la camiseta de España, el joven lateral izquierdo fue subcampeón del Mundial Juvenil Sub-19. Los Hispanos perdieron la final en penales ante Alemania, 5-4, después de un empate 36-36 en el tiempo reglamentario.
Marcos fue el máximo anotador de España, con 61 goles en ocho partidos y un 73% de efectividad. Terminó como cuarto goleador del torneo, tercero en robos (11) y líder de asistencias de su equipo (19). Su actuación le valió el premio de Jugador Más Valioso del campeonato.
Su padre, con 1,93 metros de estatura, era conocido por su potencia y sus lanzamientos desde los nueve metros
Nacido en 2007, en Ciudad Real, España, Marcos juega en la Liga Asobal con el CB Granollers (Barcelona). La temporada pasada fue convocado por primera vez a la selección absoluta, un hecho notable para alguien que en ese momento competía en la Segunda División con el CB Caserío de Ciudad Real.
El 11 de mayo de 2025, dio el salto definitivo al estrenarse con la selección absoluta. Debutó en Huesca, en el triunfo de España ante Letonia por la clasificación al Europeo. El joven lateral zurdo marcó dos goles y mostró la madurez que lo llevó a ser convocado pese a su corta edad.
Su padre, con 1,93 metros de estatura, era conocido por su potencia y sus lanzamientos desde los nueve metros. Marcos, apenas un centímetro más bajo, pero zurdo, es visto como un jugador más versátil.
A sus 18 años combina fuerza, visión de juego, asistencias y capacidad para romper defensas, cualidades que lo perfilan como una de las promesas del balonmano español.