Se pierden 400 hectáreas de tabaco en Pinar del Río por culpa de los apagones
Pinar del Río
Los directivos de Consolación del Sur se quejan de que parte de las plantaciones se han arruinado por la falta de riego
La Habana/Los constantes cortes eléctricos no solo acaban con la paciencia de los cubanos, sino con importantes ramas de la economía del país. El tabaco, uno de los rubros privilegiados por dedicarse casi enteramente a la exportación, es uno de los que más sufre. Según informó la prensa oficial, solo en el municipio de Consolación del Sur, en Pinar del Río, se perdieron en esta campaña 385 hectáreas por los apagones.
En una nota publicada en el diario local, Guerrillero, se da cuenta de la pérdida, que dañó “todas las variedades de tabaco” que se siembran en el territorio, incluyendo el de la modalidad sol en palo y el Virginia.
La producción inicial del municipio tampoco se preveía alta desde el inicio. Al comenzar la campaña, solo pudieron plantarse 1.500 hectáreas de tabaco, que han terminado mermadas ante la falta de corriente para activar los sistemas de riego. “Estimamos una afectación a razón de mitad de contrato, lo que significa 0,6 toneladas por hectárea; debido a esto tenemos una producción de 1.301 toneladas, de un plan inicial de 1.778 respectivamente”, concedió a Guerrillero Mario Luis Zamora, director de la Empresa Integral y de Tabaco en el municipio.
Según el dirigente, para esta fecha su empresa debería haber recogido cerca de 2,5 millones de cujes
Según el dirigente, para esta fecha su empresa debería haber recogido cerca de 2,5 millones de cujes, pero las duras condiciones para mantener los sembradíos han dejado la cantidad en apenas 1,9 millones, el equivalente al 79% de lo pronosticado para la campaña de este año.
Zamora tiene puesta su esperanza en que, para la próxima campaña, la situación sea distinta –cosa improbable por el estado del sistema eléctrico del país– y puedan alcanzar las 2.100 hectáreas plantadas. Para asegurar la producción de ahora, de 327 toneladas, y la venidera, añade, se han construido 1.036 casas de secado para las hojas y “se recibe el zinc necesario para techar otros 85 más”. En total, para el año que viene, calcula unas 1.800 casa techadas.
En cuanto al cultivo actual, se trabaja con lo que se tiene. “Ya tenemos todas las escogidas trabajando y beneficiando el tabaco acopiado, y aspiramos a que el próximo 26 podamos tener a más de 80% de los productores con sus tierras limpias y las cuentas saldadas”.
Con la producción de tabacos en claro aprieto, Habanos S.A –mitad española, mitad cubana– ha comenzado a prestar más atención a los puros hechos a máquina en la fábrica Internacional Cubana de Tabacos (ICT), en la capital. No son habanos ni tienen el prestigio de haber sido torcidos con el sudor de las despalilladoras, pero las ganancias que la marca obtiene gracias a las pequeñas vitolas, de tiro fácil y más económicas, los posicionan dentro de los productos más rentables. Solo en 2024, los ejemplares mecanizados aportaron 38 millones de dólares de los 827 que registró la empresa.
Con 400 trabajadores, la Internacional es la única fábrica de tabacos industriales de Cuba, y puede entregar unas 800.000 unidades diarias
Con 400 trabajadores, la Internacional es la única fábrica de tabacos industriales de Cuba, y puede entregar unas 800.000 unidades diarias. El retraso de la producción, aunque sea mínimo, se traduce en pérdida pues todo lo que se produce, aseguraron semanas atrás sus directivos a la agencia AFP, “va a la venta de manera inmediata”.
En 2001, la empresa pasó a ser de gestión mixta con Tabacalera, una compañía española que, explica AFP, pertenece a “un consorcio de inversores asiáticos cuyos nombres nunca han sido revelados oficialmente”. Cuenta con 64 máquinas que pueden producir hasta 42 puros por minuto de las marcas Cohiba, Partagás, Montecristo y Romeo y Julieta. Para mantener el ritmo, contaron los trabajadores a la agencia, el personal está dividido en tres turnos de trabajo por día, de lunes a domingo.
No obstante, Habanos S.A no puede depender únicamente de los puritos mecanizados. Su clientela de gustos lujosos y bolsillos abultados prefiere vitolas gruesas y exóticas que rondan a veces los miles de dólares. Aunque con los 827 millones de dólares que ingresó la empresa en 2024 –rompiendo su propio récord–, seguro podrá sobrevivir por un tiempo.