EE UU invita a los opositores a un acto en la residencia oficial, pero no en la embajada

La Habana/Los opositores no están invitados a la ceremonia oficial de la apertura de la embajada estadounidense en La Habana este viernes, pero sí a un acto de izado de la bandera en la residencia oficial del encargado de negocios de Washington en la capital cubana, según ha podido confirmar 14ymedio. Entre los activistas que han recibido este miércoles una invitación formal de parte del secretario de Estado, John Kerry, están Antonio González Rodiles, Martha Beatriz Roque, Elizardo Sánchez, Manuel Cuesta Morúa, Dagoberto Valdés, José Daniel Ferrer y Héctor Maseda, entre otros.

La ceremonia de izamiento de la bandera y la recepción en la residencia de Jeffrey DeLaurentis será a partir de las 4:15 pm y los convocados deberán arribar antes de las 3:45 pm “por razones de seguridad”

Washington espera resolver así el dilema que se le ha planteado con motivo del viaje oficial de John Kerry a La Habana, el primero de un secretario de Estado en setenta años.

La noticia salta un día después de que el republicano Marco Rubio pidiera por carta a Kerry que se reuniera con "los valientes líderes que luchan por liberar a Cuba e invitarlos a la ceremonia que presidirá en la nueva embajada estadounidense". "Ellos, entre otros, y no la familia Castro, son los representantes legítimos del pueblo cubano", escribió el senador estadounidense de origen cubano.

Los republicanos presionan para que se produzca un gesto del Gobierno hacia los opositores, pero la administración Obama sabe que se encuentra en una encrucijada, pues acercarse a la oposición puede ser interpretado como una ofensa por el Gobierno cubano, que considera a sus miembros "mercenarios", en un momento en que se intenta normalizar la relación. Sin embargo, dejar fuera a los disidentes puede acarrearle críticas por los sectores que acusarán a EE UU de ser tibio en su defensa de los derechos humanos.

"Estados Unidos seguirá abogando por los derechos para una asociación pacífica y libertad de expresión y religión, y seguiremos expresando nuestro apoyo para unas mejores condiciones de derechos humanos y reformas democráticas en Cuba", comentó John Kirby, portavoz del Departamento de Estado. Además de los eventos de izado de bandera, Kerry se reunirá con el canciller cubano, Bruno Rodríguez, con el que se baraja que ofrezca una rueda de prensa conjunta. Kerry también planea dar una caminata breve por la capital, de acuerdo a las autoridades.

Las reacciones de los opositores no se han hecho esperar. Martha Beatriz Roque, opositora y miembro del grupo de los 75, declaró a este diario: "A la apertura de la embajada de Cuba en Washington fueron cientos de cubanos que llevó el régimen y entonces ahora ese mismo régimen no permite que la oposición participe de la ceremonia de apertura de la embajada de Estados Unidos en La Habana. Para eso usan el pretexto de advertir que si va la oposición ellos no van".

"La recepción posterior en la residencia oficial no es otra cosa que una ronda de consuelo", opina Martha Beatriz Roque

A la pregunta de si ha habido alguna declaración pública o un trascendido al efecto, Roque contesta: "Sabemos que los funcionarios del régimen tienen como política no asistir a los eventos a donde está invitada la oposición. Ha sido así hasta el día de hoy y se han cansado de repetir que no van a cambiar para nada su política interna. Esto indica hasta qué punto el gobierno de los Estados Unidos quiere ser condescendiente con el régimen dictatorial cubano. Eso implica renunciar a la normalidad de su vida diplomática para hacer lo que quiere la dictadura. Nosotros no somos más que personas que pensamos diferente a los que gobiernan".

Y abunda en el tema: "La recepción posterior en la residencia oficial no es otra cosa que una ronda de consuelo. Puedo imaginar que para Kerry sería un problema muy serio llegar al sur de la Florida sin haber visto a la oposición interna. Ya han venido varios senadores y no se han reunido con la oposición y cuando lo hacen entonces no los recibe el Gobierno. Como todo este tiempo han estado hablando con la oposición sin tener contacto con el Gobierno, ahora optan por hablar con el Gobierno y no con la oposición".

Acerca de las opiniones de algunos exiliados en Miami, de que los opositores no deberían acudir a esa recepción de la tarde, opina: "Creo que este es un momento que no se debe desperdiciar. Esta oportunidad de encontrarse con el Secretario de Estado norteamericano no la hemos tenido desde hace más de 70 años. Momentos como estos hay que aprovecharlos para expresar lo que se piensa, porque encontrarse con alguien no significa que uno esté de acuerdo en todo con ella".

Por su parte, José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), cree que "mientras el gobierno norteamericano mantenga la solidaridad con el pueblo cubano, todos estos procesos de diálogo nos parecen muy positivos para el futuro de Cuba. La Unpacu piensa estar en la recepción que se hará el viernes en la casa de Jeffrey DeLaurentis. Lo ideal es que estuviésemos también como parte del pueblo en la ceremonia de la embajada, pero somos realistas y sabemos que vivimos bajo un sistema muy diferente a una nación libre y democrática".

Ferrer dice, comprensivo: "Si los norteamericanos han decidido entrar en este proceso complejo y difícil, tienen que moverse con cierta cautela, de manera que no molesten demasiado al régimen dictatorial. Entendemos y agradecemos que nos hayan invitado a la recepción para escuchar nuestra opinión".

"Cuba invitó a todo el que quiso al acto de la apertura de su embajada en Washington y debería dejar que EE UU hiciera lo mismo", dice Berta Soler

Otros activistas, como Berta Soler, líder de las Damas de Blanco, realizaron declaraciones a Efe. Para Soler, el encuentro con Kerry será una oportunidad para que el más alto representante del Gobierno estadounidense que visita la Isla pueda "escuchar el pensamiento y las preocupaciones de la sociedad civil independiente" en Cuba y de "hablar abiertamente de derechos humanos y presos políticos".

Sin embargo, opina que el hecho de que no haya presencia de disidentes en la ceremonia oficial del izado de bandera responde a "presiones del Gobierno de Cuba", que está poniendo "demasiadas condiciones" en el diálogo con EE UU.

"Cuba invitó a todo el que quiso al acto de la apertura de su embajada en Washington y debería dejar que EE UU hiciera lo mismo", subrayó Soler.

Elizardo Sánchez, que encabeza la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), única organización de Cuba que contabiliza las detenciones por motivos políticos, dijo que no podrá asistir porque estará fuera de la Isla el viernes.

La activista y cofundadora de las Damas de Blanco Miriam Leyva sí acudirá al encuentro con Kerry, algo "muy positivo en el marco de la nueva política proactiva de EE UU hacia Cuba", ya que "el aislamiento no ha funcionado y el principal afectado ha sido el pueblo cubano".

"A Kerry le quiero trasladar ese mensaje, que deseo que Estados Unidos llegue hasta el final en esa política de acercamiento de los dos pueblos", dijo Leiva a Efe.

Para Cuesta Morúa, de Arco Progresista, es una "muy buena noticia" que finalmente Kerry se vea con representantes de la sociedad civil, y restó importancia al hecho de que éstos no asistan a la ceremonia oficial, ya que lo importante es que "mantenga su compromiso real y concreto en la defensa y promoción de los demócratas en Cuba más allá de los actos simbólicos".

También recibió invitación Antonio González-Rodiles, líder del foro crítico Estado de Sats, quien expresó su disgusto por el hecho de que el Gobierno cubano haya vetado la presencia de disidentes en el acto oficial en la embajada, cuando "Cuba tuvo total libertad para ir a Washington con una lista de más de 500 invitados".