Cinco médicos cubanos en Sinaloa se enfrentan a la misma crisis sanitaria que atraviesa la Isla
México
Los sanitarios denuncian falta de personal y medicamentos, demasiados enfermos que atender y una pésima situación higiénica
Ciudad de México/Irse de misión no siempre significa mejorar. Lo saben bien los cinco médicos cubanos que llegaron hace varias semanas al Hospital General de Los Mochis, en el estado mexicano de Sinaloa. La instalación enfrenta numerosas críticas por su falta de condiciones, similar a la de los centros médicos de la Isla: falta personal y medicamentos, hay demasiados enfermos que atender y existe una pésima situación higiénica.
Hortensia, familiar de un paciente del centro, confirmó a 14ymedio lo deprimente que es el panorama en Los Mochis, enclavado además en uno de los estados más tensos y violentos por culpa del narcotráfico. En ese contexto, los cubanos –un anestesiólogo, una oftalmóloga, una nefróloga, una patóloga y una cardióloga– han sido, admite, un “paliativo” ante la falta de personal.
Sin embargo, advierte la mujer, pese a que “se escucha en los pasillos que hay una cardióloga cubana”, su padre –que padece arritmia ventricular– nunca la ha visto ni le “ha tocado” una consulta con la profesional.
Su presencia allí no ha representado una mejora significativa en la atención hospitalaria ni ha resuelto sus problemas logísticos
En una entrevista con el diario local Debate, la directora del hospital, Luisa Reyna Armenta, reconoció que había cubanos trabajando en Los Mochis y que gracias a La Habana “se tiene una cobertura completa” del plantel. Además, dijo que eran “bastante trabajadores”. La fuente entrevistada por 14ymedio no niega que lo sean, pero subraya que su presencia allí no ha representado una mejora significativa en la atención hospitalaria ni ha resuelto sus problemas logísticos, tan urgentes como los de personal.
“Acá lo que siguen faltando son pediatras y neonatólogos”, aclara. “Una sobrina tuvo que acudir a consulta con un médico en una clínica privada porque acá, no cuentan con estos especialistas”.
Hortensia denuncia que en Los Mochis faltan también medicamentos, una carencia a la que los cubanos están más que acostumbrados. No se trata de fármacos básicos –como el paracetamol, que suele haber– sino de tratamientos especializados. “Nunca tienen amiodarona para la arritmia ni sacubitril para reducir la presión arterial. Sin ser medicamentos de patente, uno gasta de entre 2.500 (130 dólares) a los casi 3.000 pesos (150 dólares)”.
La pensión del anciano “no alcanza”, resume, otra situación con la que no es difícil encontrar un paralelismo entre México y Cuba.
Hortensia aplaude la llegada de especialistas, pero afirma: “Qué van a hacer en un hospital dónde hace unos meses los familiares de los pacientes tenían que traer sus ventiladores porque el aire acondicionado no funcionaba. Ahora ya sirve, pero llegó la temporada de frío”.
La mujer, además, denunció una plaga de cucarachas. “El tema fue un escándalo. Un hospital en que debe contar con todos los protocolos de higiene es imperdonable que pase esto”, comentó. La prensa local comentó en su momento la situación. “Una enfermera fue a aplicar un medicamento y se sorprendió al verlas sobre la cama, en la mesa donde se colocan los alimentos y encima de mi papá”, dijo a un periódico de Sinaloa el familiar de un paciente, el pasado abril.
La directora del hospital reconoce que “todavía no cuentan con el abasto necesario”, pero asegura que a los pacientes se les brinda apoyo en el banco de sangre, en el área de neonatos, de terapia intensiva, de hemodiálisis –”que son muy caras”– y que a diario atienden de forma gratuita entre 18 y 20 pacientes crónicos.
La directora del hospital reconoce que “todavía no cuentan con el abasto necesario”, pero asegura que a diario atienden de forma gratuita entre 18 y 20 pacientes crónicos
Los médicos cubanos en Los Mochis son parte de los más de 3.000 especialistas que contrató México para atender a la población de la Montaña de Guerrero, la zona con más altos índices de pobreza y una de las más inseguras, por la presencia de varios grupos criminales que se disputan el cultivo y el comercio de droga.
Un funcionario de la jurisdicción sanitaria 01, encargada de administrar los recursos en salud, confirmó a 14ymedio que en Sinaloa se encuentran 82 médicos cubanos. “En Baca, una comunidad con 323 habitantes, se enviaron a tres; a Choix, donde habita menos de 700 personas, hay otros tres y en Chávez Talamantes se cuenta con dos médicos generales”.
A finales de septiembre pasado, los índices de violencia en el estado, donde Los Chapitos –hijos del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, sentenciado a cadena perpetua en EE UU– se disputan la plaza con una facción de Ismael Zambada, El Mayo, llevaron a la Embajada de Cuba en México a retirar a especialistas cubanos que se encontraban en la localidad sinaloense de Concordia, en el municipio de El Palmito. A la fecha no han regresado al lugar.
El Gobierno de México lleva más de cuatro años propiciando la contratación de médicos cubanos. La Administración de Andrés Manuel López Obrador desembolsó 5.188 dólares mensuales por mantener a cada uno de los facultativos de la Isla. La cifra incluye el salario –27.000 pesos (1.351 dólares)– y los costos que debe cubrir el Gobierno para pagar los alimentos, el hospedaje y el transporte de unos 966 sanitarios. De estos viáticos también se beneficiarán los 2.135 especialistas que arribaron al país este año y con los que suman 3.101 médicos.