"Hemos recibido amenazas", lamenta la alcaldesa que retiró las estatuas de Fidel Castro y Che Guevara
México
En declaraciones a '14ymedio', Alessandra Rojo propone "una subasta pública" de esas piezas para recuperar los 32.000 dólares que costaron
Ciudad de México/La alcaldesa del municipio Cuauhtémoc, en la Ciudad de México, Alessandra Rojo de la Vega, quiere sacar a subasta pública las estatuas de Fidel Castro y Ernesto Che Guevara que la semana pasada mandó retirar del banco donde estaban, en el parque Jardín Tabacalera. Así lo cuenta la política a 14ymedio, explicando que de ser posible esta solución, la subasta comenzaría en el precio al que fueron compradas originalmente –600.000 pesos, 32.000 dólares, en 2017– “corregido por la inflación de los años que han pasado”, para reinvertir ese dinero en el parque.
“Quiero devolverle a la gente ese dinero , que debió haber sido utilizado para mejorar su calidad de vida”, declara la alcaldesa por escrito a preguntas de este diario. De igual modo, asegura haber “conversado largamente sobre el tema” con la jefa de Gobierno de la capital, Clara Brugada, y con el equipo de la presidenta del país, Claudia Sheinbaum, y están dispuestos a una “mesa de trabajo” con abogados. “Nuestro equipo puede sustentar con solvencia que la acción fue legal, apegada a la buena administración y enfocada en atender una demanda ciudadana”, asevera.
Rojo de la Vega dice estar “dispuesta a escuchar” la postura del Gobierno federal y del partido oficialista, Morena, “siempre y cuando se trate de una posición centrada en el debate administrativo y en la solución que procure derechos para las vecinas y vecinos de la demarcación”.
“Quiero devolverle a la gente ese dinero , que debió haber sido utilizado para mejorar su calidad de vida”
En una de sus conferencias de prensa matutinas, Sheinbaum había criticado la retirada de las estatuas, argumentando que la decisión debía pasar “por un comité”: “No se puede quitar una estatua o monumento así. En este caso no pasó por la institución”. Ahí mismo se mostró en contra de una posible subasta de las obras, realizadas por el escultor Óscar Ponzanelli. “Sería daño patrimonial”, decretó, y adelantó que pidió que "se entregue el monumento y se reubique".
Rojo de la Vega respondió a la mandataria mexicana a través de sus redes sociales, recordándole que en 2020 afirmó que “se cerraba la ignominia en la ciudad” y que nunca más se rendiría homenaje a represores ni dictadores. “Fidel Castro y el Che Guevara fueron exactamente eso: represores, representantes de un régimen dictatorial y responsables de miles de muertes”, puntualizó la alcaldesa.
La política, elegida por una coalición opuesta al oficialismo que gobierna en la capital y en el país, reiteró que se pagaron 600.000 pesos con recursos del Capítulo 5000 del presupuesto, una partida que bien pudieron usar para “comprar maquinaria para baches o para cambiar luminaria”. Insistió en que “la Constitución, que es mucho más que un Comité administrativo, marca que nosotros tenemos facultad para administrar los bienes e inmuebles que le pertenecen a la alcaldía”.
"Ha quedado claro que Morena no considera asesinos al Che Guevara ni a Fidel Castro"
El retiro de Fidel y el Che Guevara se dio tras una análisis de ocho meses, tiempo en que varios vecinos le manifestaron su descontento. “Es una batalla no por algo ideológico, sino por la congruencia”, dijo.
En su intercambio con 14ymedio este lunes, denunció también haber recibido “muchas amenazas por cumplir y hacer cumplir la ley”, por parte incluso de “senadoras y senadores del partido de Gobierno”, y “uno que otro secretario de Gobierno”.
“Parece que existiera entre algunos o muchos de sus dirigentes una doble moral, cuando los criminales y violadores de derechos humanos son sus aliados, lo que hicieron no está mal, sólo cuando son sus adversarios es criticable”, lamenta la alcaldesa, que expresa con contundencia “Ha quedado claro que Morena no considera asesinos al Che Guevara ni a Fidel Castro, que defiende al régimen cubano, que piensan que la persecución política de Cuba no es censurable y que el éxodo masivo y los deplazamientos forzados que han existido desde la emergencia de la dictadura cubana no son moralmente criticables”.
Eso, concluye, “no es el país, ni el proyecto por el que votaron millones en las últimas elecciones, ni es el proyecto de ciudad ni país que quiere ningún mexicano”.