Sudáfrica deberá destruir el interferón cubano comprado ilegalmente por el Ejército
"No se siguió ningún proceso de adquisición", dice el medio Defense Web citando un crítico con la actuación de las Fuerzas Armadas
La Habana/El interferón comprado por el Ejército de Sudáfrica de manera ilegal a Cuba a principios de la pandemia de covid-19 por casi dos millones de dólares (más de 30 millones de rands) tendrá que ser definitivamente destruido.
La polémica adquisición formó parte este miércoles del orden del día en el Parlamento sudafricano, donde se reunió el Comité de Defensa y Veteranos Militares y se presentaron varios informes críticos con la actuación de las Fuerzas Armadas.
Según la agencia reguladora de medicamentos sudafricanos, Sahpra, toda la operación ha podido costarle al país más de 16 millones de dólares (260 millones de rands). El medicamento, llamado comercialmente Heberon Alfa R, debió haber sido devuelto a la Isla este 30 de noviembre y, si no, ser confiscado y destruido, porque su fecha de caducidad o ha expirado o está a punto de hacerlo.
Uno de los informes presentados concluye que en la compra hubo "una planificación inadecuada" que resultó en un "contrato indefinido", y que el Ejército incumplió la Ley de Medicamentos.
"No se siguió ningún proceso de adquisición", dice el medio Defense Web citando dicho informe, "ya que el medicamento se adquirió en el marco del Proyecto Thusano, un acuerdo militar entre Cuba y Sudáfrica, y todos los gastos incurridos para Heberon son irregulares".
De los 970.885 viales de Heberon adquiridos en Cuba, continúa la nota, Sahpra solamente autorizó el uso de 10 en un solo paciente, en octubre de 2020, y no otorgó más permisos.
Las recomendaciones de los informes incluyen acciones disciplinarias y la recuperación del dinero, así como la prevención de incidentes repetidos en el futuro
Las recomendaciones de los informes incluyen acciones disciplinarias y la recuperación del dinero, así como la prevención de incidentes repetidos en el futuro. La oposición, por el momento, ha declarado que el Gobierno de Cyril Ramaphosa –que no se encuentra en el país por estar de visita oficial en Nigeria–, "debe actuar", y adelanta que "rodarán cabezas".
El escándalo con este fármaco saltó hace justo un año, cuando se inició una auditoría para determinar cómo pudo el Ejército violar múltitud de normas de importación y registro de medicamentos, pues Sahpra había prohibido el Heberon cubano para el tratamiento del covid-19 por considerarlo inadecuado.
Entonces, las Fuerzas Armadas alegaron que lo compraron no como un medicamento específicamente, sino un producto biológico dirigido a la prevención ante lo que en ese momento consideraron que podía ser una guerra bacteriológica.
El interferón alfa 2B, producido por la estatal BioCubaFarma y que se emplea en el tratamiento de infecciones virales provocadas por el VIH, el virus del papiloma humano y las hepatitis tipos B y C, fue uno de los medicamentos con los que se trató el covid-19 en China en combinación con otros fármacos.
Se trata de un compuesto natural que interfiere en la multiplicación viral creando un mecanismo de inhibición en el primer nivel de respuesta del organismo y que Cuba intentó promocionar a gran escala como solución ideal contra el coronavirus. Sin embargo, la literatura científica disponible no ha podido documentar su utilidad, e incluso ha habido resultados contradictorios en estudios realizados en distintas partes del mundo.
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