La UE y Cuba afinarán esta semana detalles sensibles para el acuerdo de cooperación
Bruselas/(EFE).- La Unión Europea (UE) y Cuba tratarán de afinar esta semana los detalles que quedan pendientes para un acuerdo de diálogo político y cooperación, entre ellos el respeto a los derechos humanos y los riesgos de la proliferación de armas, indicaron este martes fuentes comunitarias.
"Buscaremos hacer el máximo de progresos (...) Si nuestra contraparte de pronto dice que está de acuerdo en todo lo que proponemos, por supuesto que es posible" concluir el acuerdo, señalaron las fuentes, aunque reconocieron que entonces sería "la negociación más rápida en la historia de la UE".
La séptima ronda de unos trabajos que se iniciaron hace dos años tendrá lugar en La Habana el 3 y 4 de marzo y cubrirá "todos los aspectos del acuerdo", teniendo en cuenta que el capítulo económico y comercial "básicamente quedó hecho" en diciembre.
"En los capítulos de diálogo político y cooperación aún hay artículos que siguen abiertos y requieren más trabajo", comentaron las fuentes, que precisaron que esta semana abordarán los textos pendientes del preámbulo del acuerdo, las provisiones generales introductorias y las provisiones institucionales finales.
Confiaron en "que podamos hacer buenos progresos. Sobre lo lejos que podamos llegar, nunca especulamos", y apuntaron que el acuerdo "debe servirnos por muchos años y es importante tomarnos el tiempo que necesitemos para lograr resultados".
Entre otros temas, se abordarán el respeto a los derechos humanos y los riesgos de la proliferación de armas
Los derechos humanos es uno de los temas pendientes y más sensibles para las dos partes.
"En el acuerdo marco que estamos negociando las provisiones sobre derechos humanos, que figuran tanto en el capítulo de diálogo político como en el de cooperación, están virtualmente hechas", afirmaron las fuentes.
Recordaron que hace unos meses la UE y Cuba celebraron una primera reunión de su diálogo estructurado sobre derechos humanos y que la idea es que este tipo de discusiones se enmarquen en el futuro en el pacto.
Apuntaron que "lo importante es crear una agenda, una plataforma más estructurada en la que podamos hablar", y se dijeron conscientes de que "tenemos puntos de vista o interpretaciones diferentes de lo que significa, por ejemplo, una democracia representativa".
"Eso no va a cambiar con este acuerdo, no vamos a liderar a los cubanos a una revelación, ésa no fue nunca la intención", enfatizaron, sino "dotarnos de un marco que nos permita discutir de manera constructiva todo tipo de asuntos, incluyendo aquellos en los que sabemos que tenemos puntos de partida bastante diferentes".
El objetivo sería, según dijeron, "identificar áreas de cooperación que nos permitan construir nuevos puentes para acompañar los cambios y las reformas hacia la modernización de Cuba".
Así, en este momento las partes intentan "encontrar las palabras adecuadas para detalles técnicos" sobre "asuntos políticos sensibles" como las reformas económicas y de modernización, la educación o la gestión del agua.
"Lo importante es crear una agenda, una plataforma más estructurada en la que podamos hablar", destacaron fuentes comunitarias
Otro punto sensible son las menciones a la migración o a "cómo gestionar más eficazmente los riesgos de la proliferación de armas pequeñas o grandes".
Por un lado, recordaron que Cuba, "como un país pequeño próximo a un vecino muy grande", quiere garantizar su derecho a la defensa y ésa es una de las razones por las que no ha firmado el tratado que regula el comercio internacional de armas.
"La UE es uno de los mayores partidarios de ese tratado, por lo que estamos intentando que los cubanos digan que les gusta aunque no lo hayan firmado", comentaron las fuentes.
En cuanto a armas de destrucción masiva, dijeron que habrá que ver "a qué tipo de equilibrio podemos llegar teniendo en cuenta su situación particular y su historia, donde 1963 sigue figurando de manera prominente", afirmaron en referencia a la crisis ese año de los misiles entre EE UU y la Unión Soviética.
"Es un acuerdo marco que esperamos que nos permita resolver o avanzar en esos asuntos en el futuro", concluyeron.
Por otra parte, las fuentes descartaron que Cuba tenga menos interés en negociar este acuerdo que la normalización de sus relaciones con EE UU y dejaron claro que ambos procesos no son comparables, aunque reconocieron que el "acercamiento gradual" entre La Habana y Washington "también afecta las relaciones con la UE" en términos, por ejemplo, de comercio e inversiones.
"La UE es y es probable que siga siendo por algún tiempo un socio más importante de Cuba que EE UU", señalaron.