La bancarización no avanza al nivel deseado por el régimen cubano
Un 30% de las operaciones se realizaron en efectivo, incluso a pesar de que, de los 800 cajeros que hay en la Isla, apenas el 77% lo dispensan
Madrid/La bancarización se estanca en Cuba a pesar de las muchas horas dedicadas en los medios oficiales a intentar fomentarla de manera artificial. El pasado año, un 30% de las operaciones se realizaron en efectivo, incluso a pesar de que, de los 800 cajeros que hay en la Isla, apenas el 77% lo dispensan, según datos ofrecidos por el Banco Central de Cuba.
En una reunión celebrada este sábado a la que asistieron Miguel Díaz-Canel y Manuel Marrero, las autoridades bancarias explicaron que al cierre de 2023, el 91% de las entidades estatales y el 74% de las “formas de gestión no estatal” mantenían actividad contable en sus cuentas.
La insistencia en lograr que la inmensa mayoría de las operaciones se realizaran de forma electrónica ha logrado un importante avance, ya que el 68% de ellas lo hicieron. Sin embargo, esto es poco para el objetivo marcado, dejó caer Yamile Berra Cires, vicepresidenta primera del BCC, quien expuso que hay aún problemas.
El 91% de las entidades estatales y el 74% de las “formas de gestión no estatal” mantenían actividad contable en sus cuentas
Entre ellos, citó la resistencia por parte de los proveedores de bienes y servicios a ejecutar cobros por los canales de pago electrónico, inadecuadas medidas organizativas y de control por entes reguladores y actores económicos que no depositan de manera estable o utilizan sus cuentas bancarias personales para la actividad económica de sus negocios.
En agosto de 2023, el BCC aprobó varias disposiciones para fomentar la llamada “bancarización” ante la escasez de billetes en el país. Entre ellas se limitaron las retiradas de efectivo y se obligó a todos los actores económicos a ofrecer un medio de pago electrónico a los clientes, lo que a su vez debía redundar en un mayor control de las operaciones y reducción del fraude.
La resistencia de la población se constata en las operaciones cuantificadas por el BCC en la reunión del sábado, a la que habría que sumar la incontrolable –y muy elevada– cantidad de las que se producen en el mercado informal, lo que reduciría drásticamente los datos oficiales.
El encuentro fue, además, un repaso de todas las iniciativas que debería tener la entidad para impulsar la economía y “corregir las distorsiones”, pero no hay, a juzgar por lo que según la prensa oficial se habló, ninguna medida concreta.
El encuentro fue, además, un repaso de todas las iniciativas que debería tener la entidad para impulsar la economía y “corregir las distorsiones”
Marrero indicó que se deben “buscar incentivos adicionales para estimular los depósitos de efectivo en los bancos del país, mejorar la calidad y prestación de los servicios, asegurar los mecanismos para la captación de divisas, buscar financiamientos externos e incrementar la apreciación de los riesgos ante ataques cibernéticos”.
Habrá que esperar para saber cómo prevé el BCC poner el plan en práctica, aunque un lector de Cubadebate exige que los ciudadanos puedan recuperar la confianza en el sistema. “Empiecen por fundar, y no digo recuperar, LA CONFIABILIDAD en el sistema bancario. Eliminen AHORA MISMO las limitaciones que se decretaron a la cantidad de dinero que se puede depositar y ese innecesario impuesto por depositar; a la cantidad mensual de dinero que se puede transferir; a la cantidad de dinero que se puede extraer... Todo eso y más ha molestado a los clientes. Y el dinero fluirá hacia los bancos, que para eso fueron inventados hace siglos”.
“Empiecen por fundar, y no digo recuperar, LA CONFIABILIDAD en el sistema bancario. Eliminen AHORA MISMO las limitaciones que se decretaron a la cantidad de dinero que se puede depositar y ese innecesario impuesto por depositar"
Juana Lilia Delgado Portal, ministra presidenta de la entidad también se expuso una lista de deseos a cumplir este 2024, entre los que la prioridad parece buscar proyectos que aumenten los ingresos en el exterior para captar divisas, así como “implementar un nuevo mecanismo para la asignación y gestión de la liquidez” del que tampoco se vislumbra nada claro.
Otra de las prioridades es la recuperación de las remesas, que se han desplomado en los últimos años de manera escandalosa. El pasado año, los emigrados solo enviaron poco menos de 1.973 millones de dólares a la Isla, un 46% menos que en 2019, cuando se captaron 3.716 millones, según el centro de ideas Cuba Siglo 21.
En 2020, la Administración de Donald Trump tomó la decisión de sancionar a las entidades que negociaran con Fincimex, el banco de los militares cubanos. Como consecuencia, la principal empresa de envío de remesas, Western Union, decidió suspender los servicios a la Isla hasta que el régimen encontró en la compañía Orbit una forma de eludir las sanciones. Aunque el dinero ha vuelto a circular –con dificultades, como la suspensión de este 2024 por un presunto hackeo a Fincimex– los volúmenes ya no son los mismos y son muchos los cubanos que recurren a canales no oficiales, como Zelle, para el envío de dinero.
“En muchos países, el Banco Central es la institución clave de la política macroeconómica. No es el caso de Cuba. El BCC “acomodará” –con liquidez sin respaldo– el nivel de déficit fiscal que le ordenen”
El BCC también mencionó la prioridad que tiene de “redimensionar el mercado cambiario”, una tarea que le han encomendado desde la dirigencia a finales de año pero, como ha señalado en varias ocasiones el economista Pedro Monreal, la entidad carece de independencia y no utiliza el mecanismo más “poderoso” que suelen emplear instituciones análogas, como es la tasa de interés.
“En muchos países, el Banco Central es la institución clave de la política macroeconómica. No es el caso de Cuba. El BCC “acomodará” –con liquidez sin respaldo– el nivel de déficit fiscal que le ordenen”, lamentó este febrero.