Petro, en caída libre
Cajón de Sastre
Decenas de personas consideran que el primer Gobierno de izquierda del país ha sido un completo desastre y un segundo mandato conduciría a la nación a su destrucción
Medellín/Escribo, desde Medellín, una ciudad pujante con gente encantadora, que considera, al menos con las decenas de personas que conversé, que el primer Gobierno de izquierda del país ha sido un completo desastre y que un segundo mandato que responda a esa proyección política conduciría a la nación a su destrucción.
La mayoría de las personas con las que trabé conversación, gente aguda con amplio vocabulario y excelente memoria, consideran al mandatario Gustavo Petro como un hombre inepto, falto de disciplina y sin otra meta que el poder, aunque ignorara qué hacer con él. Más de uno de ellos me dijo que el presidente era más incapaz que Hugo Chávez y Nicolas Maduro juntos, porque no había logrado concretar la mayoría de las metas que su administración se había propuesto, ni aun aquellas que harían posible el continuismo de sus propuestas de gobierno.
Por mi parte confieso haberme equivocado. Tenía la idea de que Petro era un hombre disciplinado, trabajador e inteligente, lo contrario a lo que me demostraron sus compatriotas y que aprecio por su fracasada gestión de gobierno en las que hay que destacar sus precarias relaciones con Washington, su posición contraria a Israel, en la que apoya a los palestinos sin mencionar los crímenes de la agrupación terrorista Hamas, y su actitud mezquina ante el premio Nobel de la Paz otorgado a la lideresa venezolana María Corina Machado.
La mayoría de las personas consideran al mandatario Gustavo Petro como un hombre inepto, falto de disciplina y sin otra meta que el poder, aunque ignorara qué hacer con él
Debo recordar que en casi todas las conversaciones se habló de un personaje que al parecer para mis interlocutores es una mezcla extremadamente peligrosa entre el místico ruso Grigori Rasputín con el francés Joseph Fouché, dos genios tenebrosos que manipularon con extrema habilidad a su favor situaciones complicadas, logrando ambos, una sobrevivencia política que escapaba a toda lógica.
Este sujeto es el actual ministro del Interior, Armando Benedetti, sin dudas un hombre hábil y de notables recursos. Fue concejal de Bogotá entre 1998 y 2000, posteriormente fue electo diputado por la capital, llegando al senado en el 2006, posición que ocupó durante 16 años, incorporándose a la campaña presidencial de Petro en 2022, luego de haber presidido la Cámara Alta.
Benedetti, más allá de los talentos que pueda poseer, es un hombre particularmente controversial. Su primer cargo en la Administración fue embajador en Venezuela, pero antes de cumplir un año en esas funciones presentó su renuncia al presidente Petro tras la publicación en los medios de grabaciones de conversaciones telefónicas en las que amenazaba a la jefa de gabinete del presidente, Laura Sarabia, con divulgar información sobre el financiamiento de la campaña electoral que podría derrocar al Gobierno y enviar personas a prisión. Después de renunciar a su cargo, ocupó otras posiciones, hasta ser nombrado ministro del Interior.
Las elecciones presidenciales en Colombia son el próximo año y al parecer cada vez es menos probable que el candidato oficialista Iván Cepeda acceda al palacio de Nariño
No voy a pasar por alto que la mayoría de la población de esa región es partidaria del ex presidente Álvaro Uribe, razón por la cual cuando el tribunal de Bogotá lo absolvió de los cargos en su contra expresaron una gran satisfacción, mientras el presidente Petro criticaba severamente la decisión judicial, a pesar de haber manifestado en el primer fallo condenatorio que respetaba las sentencias que dictaran los tribunales.
Por otra parte, aprecie una vez más que es una ciudadanía particularmente pendiente de las relaciones entre su país y Estados Unidos, condición que se evidenció cuando el presidente Donald Trump decidió cortarle la ayuda militar al Gobierno de Petro y lo situó casi en el mismo nivel que al capo Nicolas Maduro. Al calificarlo de líder del narcotráfico, las personas expresaron gran satisfacción, valoración que subió de tono cuando se supo que el mandatario, junto a su esposa, su hijo mayor y el ministro Armando Benedetti, habían sido incluidos en la Lista Clinton, nombre que se le aplica a una lista negra que reúne empresas y personas vinculadas a la posesión de dinero proveniente del narcotráfico mundial.
Las elecciones presidenciales en Colombia son el próximo año y al parecer cada vez es menos probable que el candidato oficialista Iván Cepeda acceda al palacio de Nariño. Cepeda obtuvo muchísimos menos votos que Gustavo Petro en las primarias que lo llevaron a la presidencia y es considerado por muchos más extremista políticamente que el actual mandatario. Ojalá los electores no vuelvan a equivocarse.