La militarización de Pdvsa facilita las exportaciones secretas de petróleo desde Venezuela

La Habana/El petróleo que Venezuela exporta en secreto se incrementó en febrero un 54% respecto al mes anterior, suponiendo 45.000 barriles diarios desde que entraron en vigor, el pasado 18 de febrero las sanciones de EE UU a la rusa Rosneft.

Estos desplazamientos, que siguen el modus operandi de Irán durante las sanciones de 2019 consisten en el apagado de los transpondedores (sistemas de transmisión de ubicación) para evitar la detección y pueden resultar peligrosos, como quedó de manifiesto con la muerte de un marinero cubano este fin de semana durante la realización de este tipo de maniobras.

El impacto de las sanciones sobre Rosneft se ha notado en un 11% en las dos últimas semanas, una cantidad poco significativa pero no despreciable

El impacto de las sanciones sobre Rosneft se ha notado en un 11% en las dos últimas semanas, una cantidad poco significativa pero no despreciable, según un análisis publicado este miércoles por el diario venezolano El Nacional.

La disminución se ha notado especialmente en las entregas a la India, que han bajado, según datos de Tanker Trackers, unos 43.000 barriles por día. China no importa crudo venezolano directamente desde que comenzó el año, aunque lo sigue haciendo mediante un sistema de trasvase que utiliza a Rosneft como intermediario. La empresa rusa traslada el combustible a unidades de almacenamiento flotantes en las costas de África (Togo), Europa (Malta, Gibraltar) y Asia (Singapur y Malasia) donde se realiza la transferencia de un barco a otro para llevarlo a las refinerías de China, también empleando el método de apagar los sistemas de ubicación.

Una de las navieras que más transportaba el crudo para Rosneft Trading durante 2019, Mercantile & Maritime, con sede en Singapur y una flota de nueve buques petroleros, decidió terminar las operaciones con la empresa rusa, para cumplir con las nuevas sanciones de Estados Unidos. Además, la decisión de Rosneft de utilizar a TNK Trading –otra filial de la estatal petrolera rusa– para comercializar el petróleo que sustenta el régimen venezolano estaría ya en la mira del Departamento del Tesoro de Estados Unidos para ser sancionada este mes.

En 2019 los ingresos por petróleo de Venezuela ascendieron a 10.500 millones de dólares. Este enero se obtuvieron unos 1.000 millones de dólares y el mes recién terminado 623 millones de dólares

En 2019 los ingresos por petróleo de Venezuela ascendieron a 10.500 millones de dólares. Este enero se obtuvieron unos 1.000 millones de dólares y el mes recién terminado 623 millones de dólares, un 67% de ellos procedentes de las exportaciones "fantasmas". Esos dividendos, tal y como entiende el Gobierno de EE UU, sostienen el régimen de Maduro.

Este lunes, Mercantile & Maritime, que realizaba el transporte del crudo de la compañía rusa sancionada, anunció el fin de estas operaciones para cumplir con las medidas de Washington. Apenas dos días después, el presidente venezolano declaró en emergencia a la petrolera estatal Pdvsa y designó al vicepresidente económico, Tareck el Aissami, como líder de una comisión que tendrá como objetivo reestructurar la industria nacional.

"Estoy poniendo todo el poder del Estado y de la nación para entrarle a Pdvsa con todo (...) para que ustedes dirijan y conduzcan la industria petrolera hacia un nuevo modelo de gestión socialista del siglo XXI", dijo Maduro al entregar los mandos a El Aissami, sancionado por EE UU tras una investigación que determinó que jugaba "un papel significativo en el tráfico internacional de narcóticos".

El objetivo, según Antonio de la Cruz, autor del artículo de El Nacional, es mantener el control militar de Pdvsa y someter sus movimientos a mayor secretismo. Por ello, considera que es fundamental aumentar la política de sanciones y extenderla a la estadounidense Chevron, la española Repsol, la italiana Eni, la sueca Nynas, Reliance y Nayara de la India, y Trafigura de Suiza, que están llamadas a suplir lo que Rosneft no alcance a cubrir.

A juicio del analista, Maduro considera que EE UU sigue presionando a través de las sanciones petroleras porque no se atreve a llevar a cabo una intervención militar en un año electoral

El Gobierno chavista ha mostrado su respaldo a las compañías afectadas por las sanciones de Washington y acusa al Departamento de Estado de pretender "influir en el sistema de precios, controlar o eliminar los principales actores" y "ejercer un control hegemónico del mercado petrolero mundial, una suerte de sicariato económico en contra de las empresas petroleras que no se subordinan a sus intereses imperiales y de dominación".

A juicio del analista, Maduro considera que EE UU sigue presionando a través de las sanciones petroleras porque no se atreve a llevar a cabo una intervención militar en un año electoral, pero si la estrategia falla y el chavismo continúa retando a Donald Trump la reacción de este puede ser imprevisible.

La pasada semana la Casa Blanca ya filtró algunas opciones que seguían pasando por la asfixia económica, incluyendo un bloqueo naval entre Cuba y Venezuela; pero sin descartar completamente una operación militar que aparentemente cuenta con el respaldo de varios de sus aliados, principalmente Colombia y Brasil.

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